Tras el desastre que dejó la contaminación con petróleo en la planta de la distribuidora de agua Essal en Osorno, el único imputado hasta ahora es el operario responsable del turno de la noche en la que ocurrió el accidente.
Según El Mercurio, en su testimonio a la fiscalía, el hombre reveló importantes precariedades de la planta, como que el lugar no cuenta con una iluminación acorde, los equipos son precarios y existen restricciones para usar electricidad.
El operador que trabajaba en la Planta de Tratamiento de Agua Caipulli en Osorno, desde el año 2010, asumió su responsabilidad atribuyendo al olvido del procedimiento.
“Siendo las 23:10 horas, abrí las dos válvulas del estanque de petróleo que están conectadas por una sola cañería al generador (…). Después me retiré en dirección a la oficina de la planta alta, ubicada a unos 100 metros, calculando que en aproximadamente 40 minutos se realizaría la carga completa al generado”, contó a la fiscalía.
“Sin embargo, me olvidé del procedimiento, acordándome de ello a las 00:10 horas (…), es decir, 20 minutos más de lo que corresponde, razón por la cual me trasladé en forma inmediata al sector de la planta baja, procediendo a cerrar las dos válvulas”. Fue parte del testimonio que entregó el trabajador de Essal único imputado tras la negligencia. Igualmente fiscalía estudia responsabilidades de los ejecutivos de la empresa por dolo.