La investigación canónica hecha por la Compañía de Jesús contra el sacerdote Felipe Berríos, determinó la “verosimilitud de los actos de significación sexual de distinta relevancia”.
Según señala el informe los episodios denunciados se refieren a “tocaciones y diversos traspasos de límites en el ejercicio del sacerdocio” durante 1993 y 2009.
“Como Compañía de Jesús emitimos este comunicado en el contexto de nuestro compromiso con la búsqueda de la verdad y de la justicia. También, manifestamos nuestro absoluto rechazo a cualquier tipo de abuso”, señaló la compañía en un comunicado.
Cabe recordar que el caso se publicó el pasado 3 de mayo cuando los Jesuitas decidieron sacar de sus funciones al sacerdote.