Luego de dos años de prácticamente inactividad, de a poco comienzan a retornar
a sus funciones.
Primero fue la llamada “Revuelta Social “ , luego llegó la Pandemia. Estos dos detonantes,
golpearon fuertemente al rubro del transporte escolar, dejando a dueños y conductores de un día
para otro sin fuente de trabajo.
El panorama que se vivió fue especialmente complejo, obligando a algunos de ellos a
reinventarse, acogerse al traslado de pacientes con Covid (actividad que llegó como ayuda por
parte del Gobierno), solicitar bonos y tratar de sortear las vicisitudes que les tocó vivir.
Sin embargo, hoy con la vuelta presencial obligatoria a clases de todos los colegios, hemos
comenzado a ver nuevamente a los tíos y tías del furgón recorriendo nuestra ciudad en busca de
sus pequeños pasajeros.
Consultado Alfredo Araya, Seremi de Transportes y Telecomunicaciones de nuestra
Región, respecto al parque de buses escolares y su reinserción al mercado, este señaló. “La verdad
es que en nuestra región tenemos 256 móviles inscritos en el Registro Nacional de Transporte
Público (RENASTRE). Ese total, no necesariamente implica que tengan todos sus papeles al día, sino
que están inscritos para poder ejercer esta función. Sin embargo, vemos con satisfacción que un
gran porcentaje de ellos ha empezado a regularizar sus papeles para volver el primer y segundo
semestre a sus funciones. Digo con gran satisfacción, porque este ha sido uno de los rubros más
golpeados incluso antes de la pandemia. NO olvidemos que para la revuelta social se cortaron las
clases presenciales y desde esa fecha hasta ahora han pasado 2 años.
Hay que agregar que a estos 256 dueños particulares de vehículos que realizaban
transporte escolar, debíamos sumar otros 19 que ejercían el mismo servicio de traslado de
escolares, pero a zonas aisladas de difícil acceso. Estos servicios son los denominados “subsidio
escolar”, que implementamos como Seremía. En este último caso, los operadores siguieron con sus
contratos pese a todo, ya que durante todo el año sirvieron de puente para la entrega de canastas
familiares, guías de colegio, tareas etc. Señaló la autoridad.
Finalmente, desde la Seremi de Transportes se hizo un llamado a los padres y apoderados a
ser los principales fiscalizadores de quienes tendrán la responsabilidad de traslado de sus hijos.
Para eso recomiendan poner atención a los siguientes puntos.
El conductor debe poseer y portar licencia profesional clase A1 (ley 18.290
antigua) o clase A3 (ley 19.495 o ley 19.710).
En un lugar visible, al interior del vehículo, debe portar una tarjeta identificadora
con fotografía y datos personales del conductor.
Si en el vehículo se trasladan 5 o más niños y niñas de pre-básica, el conductor
debe contar con un acompañante adulto que vele por la seguridad, con especial
énfasis en el cuidado al descender del vehículo e ingresar al establecimiento
educacional o a su casa.
Por último, el apoderado puede revisar que el conductor y o acompañante no se
encuentre en el registro de personas inhabilitadas para trabajar con niños. Para
ello puede ingresar el nombre y Rut del conductor en www.screi.cl