El expresidente chino de Interpol, Meng Hongwei, se declaró culpable de corrupción durante su juicio en Tianjin, China. Meng fue acusado por un juzgado de aceptar sobornos de 14 millones de yuanes (2 millones de dólares) desde 2005 hasta 2017.
Meng, fue viceministro de Seguridad Pública en China, mostró arrepentimiento por haber aceptado los sobornos.
Meng Hongwei es el enésimo dirigente comunista afectado por la campaña anticorrupción lanzada por el presidente Xi Jinping en 2013, poco después de su llegada al poder. Algunos sospechan que más que limpiar de corrupción al país, está sirviendo para sacar del paso a opositores al partido de Xi.