Durante esta jornada, la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI allanó las oficinas centrales de la Compañía de Jesús, en la región Metropolitana.
Cabe mencionar que todo esto sucede en el marco del caso del sacerdote Felipe Berríos, en el que una mujer de 32 años denunció haber sido víctima de actos de significación sexual por parte de Berríos.
Por otro lado, la investigación canónica hecha en contra del presbítero por la Compañía de Jesús confirmó los denuncias que se refieren a “tocaciones y traspaso de límites” durante 1993 y 2009.
En cuanto al allanamiento, la Fiscalía Sur solicitó en reiteradas ocasiones la información para avanzar en la causa penal, sin embargo, esta se abrió al momento en el que el cura se “autodenunció”.
Se espera que tras la acción de este día se encuentre la documentación de investigación mencionada. Es importante señalar que la Compañía de Jesús aseguraron que el informe se envió al Vaticano para continuar con el procedimiento canónico.