La Oficina Regional de Investigación Criminal en Berlín, investiga las amenazas de muerte recibidas a varios cargos públicos en Alemania, tras el asesinato del político conservador Walter Lübcke el 2 de junio.
En la investigación resalta el caso de dos alcaldes que ya han recibido ataques en el pasado. Se trata de la alcaldesa de Köln, Henriette Reker, y de Andreas Hollstein de la ciudad de Altena. Los dos políticos que han expresado estar a favor de la política migratoria.
Reker, en 2015 permaneció varios días en coma inducido tras ser atacada con un cuchillo por un ultraderechista en la víspera de las elecciones municipales. Hoy recibió un correo electrónico en el que su autor asegura que con la muerte de Lübcke comienza una "fase de inminentes purgas".
A Lübcke "le seguirán muchos otros, entre otros, ustedes dos”", dice la amenaza, recibida también por el alcalde de Altena, Hollstein, quien en 2017 fue acuchillado.
En declaraciones públicas, el alcalde de Leipzig, Burkhard Jung, destacó la urgencia de abrir un debate en torno al trato que sufren muchos políticos locales, principalmente por el hecho de hablar de vida o muerte con este tipo de amenazas.
En contexto, Walter Lübcke, de 65 años, fue hallado muerto de un balazo el 2 de junio en su casa de Kassel. La policía detuvo por este hecho a un sospechoso de 45 años vinculado a un grupo neonazi.